09/07/2018
Capitana y referente en el surgimiento de las Leonas, Karina Masotta recordó su paso por el seleccionado del que se retiró hace 15 años luego de haber alzado la Copa del Mundo en Perth 2002; el primer título mundial mayor para el hockey argentino. En la previa de Londres, donde el conjunto de Agustín Corradini buscará la tercera medalla dorada, la ex-delantera argentina habló sobre el presente del equipo, al que visitó en el último entrenamiento en Buenos Aires.
Difícil es olvidar su baile levantando la Copa del Mundo en Perth 2002, en aquella madrugada del 8 de diciembre. Referente y con un bajo perfil, fue la portadora de la cinta de capitana -desde 1997- en el surgimiento de las Leonas en los Juegos Olímpicos de Sydney 2000 donde se se colgó la medalla de plata. Un año después, en Amstelveen 2001, levantó el primer Trofeo de Campeones. En 2003, con 205 partidos internacionales disputados, puso fin a su carrera internacional luego de vestir la camiseta argentina por 16 temporadas.
Karina Masotta jugó cuatro Copas del Mundo (1990, 1994, 1998 y 2002) y a 13 días del debut argentino en el Mundial de Londres, habló sobre el presente del equipo dirigido por Agustín Corradini al que fue a visitar en el último entrenamiento en Buenos Aires junto a otras ex-Leonas: Magdalena Aicega y Carla Rebecchi.
"Las vi con muchas ganas y unidas; con expectativas de que quieren estar arriba del podio. Es un grupo nuevo conformado por jugadoras con más y menos experiencia, pero las vivencias que van a tener van a ser exclusivas de ellas", aseguró.
Respecto al momento compartido con el equipo argentino en la última práctica en Buenos Aires, manifestó: "Estas cosas te traen muchos recuerdos y la adrenalina previa antes de una competencia. Me tocó romper el hielo y las vi muy concentradas en lo que cada una de nosotras les decíamos. Les fuimos transmitiendo que pasamos circunstancias distintas y a la vez parecidas, en las cuales tienen que estar mentalmente bien y todas a su cien por ciento; que son totalmente distintas e individuales. A las chicas hay que contenerlas, saber lo que necesitan y cómo lo necesitan, y considero que el haber dado un pequeño consejo o una pequeña charla nos hizo bien a todos y sobre todo al hockey".
"¿Si me dan ganas de volver a jugar un mundial? Claro que sí, es muy lindo jugar algo que te pertenece y en el que hacés lo que disfrutás. Me encantaría ponerme nuevamente la 11 y estar dentro de la cancha de cualquier manera; no lo cambio por nada. Con la lejanía y vejez que tengo quiero seguir estando adentro de la cancha y cuando las veo lo disfruto; me pongo bien y mal, corrijo y vivo ese momento", reconoció la ex-jugadora de Mitre.
Por todo lo vivido y más, Masotta es palabra autorizada. Comenzó a jugar en el seleccionado a los 15 años, debutando en el Sudamericano de Chile de 1987. Jugadora emblemática durante la década de los 90, fue distinguida como mejor jugadora del Mundial de Dublin 1994, un reconocimiento que ningún jugador argentino había alcanzado anteriormente. Hoy sigue ligada al hockey para transmitir sus conocimientos, experiencias y sobre todo, los valores: "Hoy tengo la posibilidad de estar con los Sub 18 (Buenos Aires) y es una vivencia única que trato de transferirla desde mi persona y con jugadoras a las que trato como personas que después, como consecuencia, son deportistas. Tengo el privilegio de poder hacerlo y estoy muy contenta con eso", concluyó.
Prensa CAH.