10/07/2018
Durante cinco años fue capitana de las Leonas tras el retiro de Karina Masotta en 2003 y logró mantener viva la esencia de un seleccionado que perdura hasta el día de hoy. Magdalena Aicega rememoró sus vivencias vistiendo la camiseta argentina que defendió durante 16 temporadas. En la previa a la Copa del Mundo de Londres, donde el conjunto de Agustín Corradini buscará la tercera medalla dorada, la ex-defensora albiceleste habló sobre el presente del equipo al que le brindó su apoyo en el último entrenamiento en Buenos Aires.
Sus primeros pasos con la camiseta argentina los dio en el Mundial Junior de Terrassa 1993 donde el seleccionado nacional consiguió el primer título para la disciplina. Un año después se ganó un lugar en la defensa del combinado mayor en el Mundial de Dublin 1994 (medalla de plata) para finalmente afianzarse por más de 15 años, sucediendo con su liderazgo nato -dentro y fuera de la cancha- a Karina Masotta en la capitanía, entre 2003 y 2008, año en el que puso fin a su intachable carrera internacional.
Campeona Mundial mayor en Perth 2002, dueña de tres medallas olímpicas (plata en Sídney 2000 y bronce en Atenas 2004 y Beijing 2008), cuádruple campeona Panamericana (Mar del Plata 1995, Winnipeg 1999, Santo Domingo 2003 y Río de Janeiro 2007) y campeona en los Trofeos de Campeones de 2001 y 2008, son algunos de los logros deportivos cosechados por Aicega sobre un total de 300 partidos oficiales vistiendo la camiseta albiceleste, defendiéndola con garras y dientes.
"Estuvo buenísimo porque pudimos de alguna manera transmitirles a las chicas nuestras sensaciones y experiencias, y ellas estuvieron muy dispuestas a escuchar. Me quedé muy tranquila porque vi un grupo súper unido. Lo principal era que sientan el apoyo de todas las que alguna vez estuvimos en su lugar, que vayan en paz, disfruten y que el resultado será una consecuencia de todo lo que ellas habían hecho", precisó Aicega, quien estuvo presente en el último entrenamiento de las Leonas en Buenos Aires, junto a Masotta y Carla Rebecchi.
"¿Si me preguntan cómo van a salir en el mundial? Este grupo está ganando en formar grupo y eso es un paso más que importante. Creo que les va a ir muy bien, pero vayamos pasito a pasito. Es un grupo muy nuevo y por ponerte la camiseta argentina no ganás un torneo, hay que trabajar mucho y ellas lo saben más que nadie", aseveró.
"Es mentira si alguien te dice que no extrañás nada. La adrenalina de ponerte la camiseta argentina y entrar a una cancha la extrañé toda mi vida desde el día que me fui del seleccionado hasta el día de hoy y lo será siempre. Simplemente sé que son etapas cerradas que ya uno no las vive más porque justamente son etapas; fueron 16 años de lo más lindo de mi vida", reconoció la defensora de Belgrano Athletic quien a sus 44 años se mantiene vigente en el hockey Metropolitano.
"Uno siempre quiere trabajar y estar con el equipo; a veces se puede y a veces no. Agustin (Corradini) y Nelly (Giscafré) son personas que quisieron acercarnos y nosotras estamos para colaborar, aportar nuestro granito de arena y transmitir los valores por haber vestido la camiseta", expresó.
Prensa CAH.